“Los coliformes fecales no son
contaminantes, pero si sus amigos que andan apegados a ellos” – Dice Esval
“Quedé muy conforme, y muy clara
la información que nos entregó Esval” –Dice
el Alcalde.
Por Patricio Gómez Bahamonde
Ingiero comercial PUCV & UAI
La empresa que provee el agua en Algarrobo, Esval S.A., se
formó en el año 1989, cuando la Corporación de Fomento de la Producción y el
Fisco de Chile la constituyeron como empresa de servicio público. Nueve años después,
en el año 1998 Esval se convirtió en la primera sanitaria en abrirse a la
incorporación de capital privado, por medio de un proceso de licitación
internacional. Aguas Puerto (Enersis 72% y Anglian Water Chile 28%), se
adjudicó el 40% de la propiedad de la empresa. Posteriormente, en el año 2007
la corporación canadiense “Ontario Teachers´ Pension Plan” (Fondo de Pensiones
de los Profesores) adquirió el 69,4% de
las acciones de Esval, constituyéndose así
en el principal accionista de Esval Chile.
En
su Código de Ética, dentro de los principios que guían su actuar, entre otros,
se señala, dos principios que es importante tener presente para los efectos de
la situación de las aguas servidas de Algarrobo:
· IX. Contribuimos al desarrollo de la comunidad, entendiendo su valor
como socios estratégicos y aliados a largo plazo. Nuestro servicio y gestión
busca relaciones sustentables y de confianza.
· X. Nuestra labor está comprometida con el cuidado del medio ambiente y
la gestión sustentable.
A raíz
de una investigación hecha por una asociación de vecinos sobre la Planta de
Tratamiento de las aguas servidas, se comprobó que dicha Planta no tenía la certificación
de recepción final de la Dirección de Obras Municipales, lo que obligó al
Director de ese Departamento oficiar al alcalde la orden de demolición conforme
a la Ley. A eso se sumó la permanente preocupación existente en la comunidad
por el hecho que las aguas servidas no tienen efectivamente ningún tratamiento,
por lo cual se cobra una tarifa y estas son vertidas al mar a través de un
emisario que está tan solo a 1.200 de la playa. Pescadores, navegantes y
aviadores civiles, han manifestado que en el punto donde se vierten esas agua
forma una inmensa mancha contaminante. Hasta la fecha, no habido ante la opinión
publica una presentación de estudios técnicos de una entidad independiente
sobre los efectos de ese vertedero y si la distancia es la adecuada y está en
un punto en que la corriente marina desplaza ese material hacia el interior.
