LOS ADULTOS SABIOS DE ALGARROBO

Artículo de Opinión

(Las opiniones vertidas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento ni la línea editorial de este Diario)

Conocidos como los adultos mayores, ¿quiénes con?, ¿cómo viven?, ¿por qué decidieron vivir en Algarrobo?, ¿cuáles son sus necesidades y problemas?, sobre todo ¿qué piensan?

por Carmen Salazar López 

Bióloga, profesora de ciencias, Magister en Administración Educacional

Candidata a concejal por Algarrobo

Estas son algunas de muchas interrogantes que me he planteado en este espacio de tiempo que llevo viviendo en esta comuna.  Estas preguntas han surgido en mi cabeza a raíz de las muchas conversaciones y observaciones que he realizado en mi interacción con mis vecinos y las personas que me ha tocado conocer por innumerables razones.  Pienso que estas interrogantes se merecen de respuestas, ciertamente, merecen ser atendidas pues si hay algo que he aprendido con los años es que las personas mayores son un recipiente de conocimiento y sabiduría construido a través de las vicisitudes de la vida que vale la pena dedicar tiempo y esfuerzo por difundir y abordar sus temas.  Tal vez, es porque siento que me acerco cada vez más rápido a ocupar el espacio de ellos, tal vez.

Nuestros sabios mayores que se han establecido en Algarrobo, en gran medida lo han hecho buscando tranquilidad para pasar sus últimos años.  Se han arrancado de la locura y caos interno que produce la vida en las grandes ciudades, especialmente Santiago, y han hecho una apuesta de vida en su traslado a Algarrobo.   Muchos vendieron lo que tenían en Santiago y pusieron todos sus huevos en esta canasta. En su mayor parte son parejas de personas que al jubilarse,  o disminuir notoriamente su carga de trabajo,  o bien porque están en el proceso del retiro con hijos adultos e independientes, han hecho de Algarrobo su lugar definitivo, transformado sus casas de veraneo o construyendo nuevas viviendas. Entre este grupo se destacan profesionales y trabajadores de buen nivel que buscan obtener una calidad de vida mejor a la que tenían en Santiago.  Sus expectativas de mejor vida, sin embargo, se han visto confrontadas con una realidad que les genera insatisfacción y frustraciones.

No obstante ser un grupo de nuestra sociedad que muchos consideran con necesidades de atención relativamente homogénea a la hora de construir y elaborar políticas públicas, ellos tienen numerosas  características, tan diversas entre sí que constituyen una riqueza de aporte a la sociedad singular en su naturaleza. 

Por dar algunos ejemplos de algunas características, en Algarrobo:

• Algunos están en proceso de retiro o recién retirados, en los inicios del proceso de gozar el tan anhelado momento de retiro tranquilo. Para todos los efectos, son aún personas jóvenes autovalentes con ganas de disfrutar y hacer cosas;
• Otros son de más avanzada edad y requieren de atención y cuidados especiales, muchos de ellos están solos pues ya su compañero o compañera de vida se ha ido y sus hijos y nietos no viven acá; y
• Finalmente está ese grupo que viene acompañando a algún hijo/a adulto que trabaja principalmente en Santiago o Valparaíso y viven con una situación económica tranquila.  Estos hijos han decidido trasladarse a Algarrobo con sus padres y su familia joven en desarrollo como una opción de vida más sana para el crecimiento de los hijos.  Este grupo de adultos mayores, en particular requiere de una mirada más profunda pues sus necesidades de vida son muy distintas al resto de los habitantes de Algarrobo.

Algunos datos interesantes sobre la diversidad de los adultos mayores de Algarrobo:

• En nuestra comuna, hay 3 personas que hablan mapudungun y un hombre que habla aymara, 338 personas (15% de la población de los adultos mayores) que hablan inglés, 175 personas que hablan otros idiomas distintos a los nombrados (francés, alemán, etc.).  Esto significa que tenemos un tremendo potencial de transmisión de cultura en nuestra ciudad. Lo más importante a rescatar de este análisis es que existe un grupo importante de personas mayores en Algarrobo que pueden hacer un gran aporte a nuestra comunidad.  Solo a modo de ejemplo, podemos mencionar: colaboración  a las escuelas en desarrollo en talleres de conversación en otros idiomas, no solo para alumnos sino para toda comunidad educativa que permita transmitir idioma y cultura.  Los pueblos que son políglotas tienen una mirada de mundo  más amplia, son capaces de comprender el sentido de ciertas cosas que las personas que tienen un solo idioma no logran darse cuenta. El solo hecho de hablar con una estructura gramatical, con palabras que tienen un sentido distinto nos hace hacer comparaciones que a veces las personas no logran tener.  Un programa de desarrollo de Algarrobo que cuente con una línea de trabajo de potenciación idiomática es un programa que tiene un gran alcance a futuro.
• En Algarrobo existen muchos adultos mayores con distintos grados de discapacidad.  Por ejemplo, hay 409 personas con discapacidad física.  Si pensamos que un kinesiólogo puede atender pacientes en 45 minutos por 8 horas, en un día podría trabajar con 11 pacientes.  En un mes su alcance serían 235 pacientes.  Esto significa que un solo kinesiólogo no alcanza a jornada completa.  Estas suposiciones presumen que el adulto mayor se puede desplazar al consultorio, si el kinesiólogo de debe trasladar a algún domicilio, la cifra disminuye.  Para comprender la envergadura de estas cifras, podríamos aventurar que se necesitan al menos 3 kinesiólogos a jornada completa, solo para satisfacer las necesidades de los adultos mayores, sin considerar la necesidad de estos profesionales para ver  niños, deportistas, accidentados, etc.  Otras discapacidades presentes en los adultos mayores de Algarrobo: 53 personas con mudez, 258 personas con sordera. Los temas de sordera por sí solos ameritarían que existiese un puesto con técnico especializado para atender en el consultorio todos los servicios que requieren los audífonos y su mantención.  Hay 243 personas con problemas de ceguera parcial o total y 89 personas con dificultades psiquiátricas o mentales, lo que requiere también de un programa de atención neurológica, psiquiátrica y psicológica.
• El 15-20 % de la población de adultos mayores votantes. Esto en cifras corresponde al doble que el nivel nacional.  Esto significa, en pocas palabras, que tienen un poder de decisión importante a la hora de elegir a los representantes de un gobierno local, especialmente si se considera que es una población con un alto grado de conciencia cívica.  Se podrán imaginar que son personas que no solo ven con mucho interés el desarrollo de la comunidad sino que con sus capacidades e historias de vida están  en condiciones de hacer grandes aportes a cualquier desarrollo comunal.

¿Cuál debería ser el rol de los adultos mayores en la nueva sociedad en general y  Algarrobo en particular? 

Todo depende de cómo nosotros mismos los valoramos y reconocemos.  Si los consideramos como personas que, si bien tienen ciertas necesidades especiales particulares de su grupo etario, pueden contribuir de manera positiva y educadora a las nuevas generaciones en el desarrollo de la comunidad local, no solo se transforman en sujetos de desarrollo y atención sino que en sujetos de desarrollo de la comunidad.

Esa mirada de integración activa  de los adultos mayores a la comunidad  puede ser un catalizador de futuras políticas públicas sobre los adultos mayores en nuestro país.  Soy una convencida que su integración valorada y aporte al desarrollo de las políticas públicas comunales con calidad y experiencia de vida generará algo distinto a lo que se ha hecho tradicionalmente.  Por lo tanto se obtendrán resultados superiores.

   

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