Artículo de Opinión
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Columna
diario “El Mercurio”.
El empobrecimiento de la política es
responsabilidad tanto de la izquierda como de la derecha y del
"centro", que a estas alturas no sabemos qué es y dónde está
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| Cristián Warnken |
Por Cristián Warnken Lihn.
Profesor de literatura, comunicador y poeta chileno.
¡Qué pobre escenario el de
esta segunda vuelta presidencial! Tener que elegir entre Piñera, que se ha
movido en la cuerda floja de lo legal y lo ético y ha reducido la política a lo
económico, y Guillier, un político sin energía, sin contenido, que más que
representar el mundo "progresista" a ratos parece ser el candidato de
los operadores en el Estado de una coalición ya muerta. Estamos en el peor de
los mundos: tener que votar por el mal menor. La resignación al mal menor es el
comienzo de la decadencia.
El empobrecimiento de la
política es responsabilidad tanto de la izquierda como de la derecha y del
"centro", que a estas alturas no sabemos qué es y dónde está. Pero
también es responsabilidad de los ciudadanos, que siguen votando por los "males
menores" en sus ciudades y regiones, legitimando caudillismos
clientelistas nefastos. Entre los diputados y senadores electos hay rostros
nuevos y esperanzadores, pero también muchos representantes de lo peor de la
mala política.
¿Cómo escapar de este
escenario paupérrimo al que nos ha condenado la mala política? Hay una manera
de escapar de Tontilandia (así bautizó Jenaro Prieto a Chile) y es a través de
la imaginación, la madre de todas las facultades. Todos tenemos derecho a soñar.
Voy a imaginar, entonces, una elección en la que se nos permita a los votantes
"náufragos" y huérfanos introducir una tercera opción. Como Nicanor
Parra, que en el contexto de la dictadura militar levantó el candidato más
aglutinador de todos: Nadie. ¿Y por qué Nadie? Porque Nadie tiene visión de
país, Nadie quiere recuperar el sentido genuino de la política. ¡Nadie es el
candidato por un Chile mejor! No hay que despreciar a este don Nadie:
recordemos que el navegante griego Ulises se salvó de que se lo comiera el
monstruo Polífemo identificándose ante él como "Nadie".
Nuestros políticos son
energúmenos, como ese Polífemo: monstruos de un solo ojo, sin visión. ¡Y nos
quieren devorar! Como Ulises, debemos enfrentar, además, los escollos de los
cantos de Sirenas: los ofertones y promesas vacías, los programas (o
compendios) mentirosos. Nadie, entonces. Esa es la alternativa antipoética.
Pero existe una alternativa más poética que es pensar que para estos tiempos
crispados, vertiginosos, lo que hace falta es un Presidente sereno, que no
agite más las aguas de lo que ya están. Ni el hiperkinético Piñera ni el
desganado Guillier.
Necesitamos la figura del
Sabio. Un Lao-Tsé "chilensis". ¿Y quién podría ser? Propongo a Gastón
Soublette, profesor de estética, estudioso de la sabiduría popular y la cultura
mapuche, un anciano venerable. Me lo imagino entrando a La Moneda con su
clásico poncho de lonko y saludando a las multitudes con un discurso con mucho
sentido común. Porque eso es lo que nos falta hoy: sentido común. Me dirán que
no es un buen gestor... ¡Pero ser buen Presidente no es ser solo buen gestor!
Mitterrand dijo una vez: "yo soy tal vez el último Presidente; después ya
no habrá Presidentes, sino contadores".
Gobernar un país es también
educarlo, ya lo dijo Pedro Aguirre Cerda. Lo que está muy mal en Chile es el
estado de ánimo: los países y las personas no crecen si están llenos de rabias
(algunas justificadas, otras no), resentimiento, odiosidad, miedos. La derecha
aporta miedo; la izquierda, resentimiento. De esos dos estados de ánimo nada
bueno puede salir. Soublette, con su mirada transparente y ritmo armónico, lo
haría muy bien: crearía, para pensar las grandes directrices del país, un
Consejo de Ancianos y Jóvenes: la fractura generacional es un gran tema hoy en
Chile. Y un diálogo entre los sabios que dan la templanza y los jóvenes que
traen la energía nueva es urgente. Las culturas -ya lo dijo Ricoeur- se
construyen haciendo la síntesis de tradición e innovación.
Propongo, entonces, que se nos
permita introducir una tercera opción en la papeleta. Piñera y Guillier: ¿se
atreven a competir con Nadie o Soublette?
Fuente: Diario El Mercurio, edición del 24.11.2017 Página
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Este escenario político descrito por Warnken es el mismo que se da aquí y en la quebrada del ají. Si los gringos eligieron a Trump, los venezolanos a Maduro, los argentinos a la Fernández, los brasileños a Dilma ¿Qué tan mal es que en Chile nos hagamos de Piñera o de Guillier?
ResponderEliminarLa raza política no es una tribu ni etnia ni casta de sabios, eruditos, expertos, peritos, cultos, castos, prudentes, versados ni lumbreras. Y ¡por favor! ni siquiera mencionemos aquel marketero slogan de la vocación de servicio público.
Lo que sí distingue a la mayoría absoluta de estos personajes es la exaltada opinión que ellos tienen de sí mismos, su concienzuda ambición a escalar entre sus pares y un ego del porte de una catedral. Evidentemente, el componente principal es la raza humana. Por lo tanto, también hay tipos buena gente, gestores de buenas obras, polifuncionales al servicio de los demás y hasta patriotas que invierten sus vidas en pro de la justicia y la nobleza.
Sin embargo, en una sociedad consumista, capitalista, de libre mercado y con pretensiones socialistas (¿?), es difícil que un millonario-político de carrera (corta) o un periodista de farándula política y político de carrera (requete corta) lleguen a estas instancias de poder con más bagaje que el verso y un paquete de intenciones que no es más que un listado de promesas de cosas por hacer que ha sido elaborado por un un grupo de publicistas políticos profesionales.
Los candidatos son aspirantes a piezas de una maquinaria que tiene muchísimos botones y una porrada de gerentes que se mandan las partes y sacan jugo sin permiso. En este gobierno, hasta los familiares más íntimos se dieron sus atracones.
Warnken...¿Profesor de literatura, comunicador y poeta? De política sabe menos que Nadie y su filósofo candidato, Gastón Soublette, duraría en el poder lo que un gas después de los laxantes.
Chile, es lo que es, aquí, allá, en el Norte y en el Sur. Nadie, no es candidato. Sólo Piñera y Guillier. No tenemos para regocijarnos, pero sí para andar libres por las calles, dedicados a nuestras cosas, echándole para adelante y dándole de comer a la familia. Estos son tiempos violentos, de temblores, calentamientos globales y erupciones. Ni un Piñera ni un Guillier van a romper la ecuación. Apenas nos darán matices, algunos cambios y giros de timón que saquen chispas y una que otra bobada que nos ilusione por un rato. Aquí, no hay generación dorada como en el fútbol.
Soy Nelson Pérez B Es lo que se decidió y lógicamente debemos elegir al mejor, cada uno de nosotros, ya que estará en juego por los próximos 4 años la autoridad mas alta del País y de la que dependeremos Algarrobinos y Chilenos todos. Así como elegimos Alcalde y Concejales en Algarrobo hay que apoyarlos en sus gestiones cotidianas.
ResponderEliminarAclaremos las cosas, existen posibles candidatos jóvenes e idóneos, con conocimiento sistémico, experiencia laboral, probo y con vocación de servicio.
ResponderEliminarA esos, la comunidad no los quiere, porque privilegian el futuro y no son demagogos.
Los electores, y en especial en Algarrobo, prefieren una autoridad que les entregue beneficios gratuitos, subsidios, regalos que no les signifiquen esfuerzos, aunque hipotequemos el futuro de nuestros hijos.
Si nosotros no cambiamos la mirada, jamás postularemos autoridades eficientes.
Sr. Caro, los que usted señala se refiere a técnicos buenas personas que carecen de bagaje político; gracias a esa condición no pasarán el tamiz impuesto por la masa apernada en el poder y por los otros líderes que confabulan pactos y componendas. Lo de aquí, no da para ser cándido ni ingenuo. La selva política -tal cual es- no está para idealismos ni ensoñaciones. Pasarán largas décadas antes que el sistema político esté compuesto por gente limpia, proba y eficiente, y para que el pueblo nacional haya aprendido a elegir personas políticas competentes y con verdadera vocación de servicio.
EliminarLo que usted indica, que los electores de Algarrobo prefieren una autoridad que les entregue beneficios gratuitos, es una simpleza. Aquí, todos se conocen entre ellos y se apuesta a lo local. Una pésima práctica que sólo sirve para estancar a Algarrobo, porque los locales a cargo del buque no tienen el conocimiento ni tampoco entienden nada de las implicancias que hay detrás de la administración y el desarrollo de un proyecto de la envergadura de Algarrobo.
Esta columna me recuerda el dicho " DIJO EL PICAO ". Si Goic ganaba, tenía que gobernar con todos los que ahora critica, pero perdió y por paliza. Por primera no estoy para nada de acuerdo con Warken quien evidencia que acusó recibo del golpe. Y los mayores asi como jubilan de sus trabajos también deben jubilar de la política. Tengo en fé en Chile y su futuro. Mentes jóvenes y manos limpias irrumpen irreversiblemente para dirigir los destinos de este país que de una vez y para siempre, transitará por caminos de mayor igualdad, solidaridad y justicia social, terminando con las aberrantes diferencias. Respecto de las autoridades locales, no dan ni para un comentario. Saludos
ResponderEliminarEntonces según usted Guillier es el líder para dirigir el país? No es un poquito liviano? Y Piñera es dar la espalda a la necesidad de cambios de justicia social. Concuerdo con Cristián Warnken, ni lo uno ni lo otro. Estamos frente al vacío de no tener a nadie que nos dirija. Habrá que votar por el mal menor y ese es Piñera, sin mayoría en el parlamente no puede poner reversa, el comercio se revalorizará y la juventud tendrá que esperar
EliminarEs una visión simple pensar en Piñera o Guiller. Las personas representan proyectos e ideales. Piñera se quedó sin proyecto alguno. Guiller con el apoyo de todos gobernará y hará un buen gobierno de reformas sociales. Tiene el respaldo de la ciudadanía a pesasr de lo que decían las encuestas. Es tiempo de cambio.
Eliminar¿Es cierto lo de Piñera y Guillier?, claro. ¿ Es cierto que nadie o Gaston Soublette son candidatos?, No. Esta vez lo que dice Warnken tiene una lectura exacta, esto se trata ciudadanos y Elite,ahora política. ¿Que es lo bueno y cual es el riesgo de lo que esta ocurriendo en esta segunda vuelta?. Lo bueno, Podríamos decir que un grupo importante de ciudadanos completamente nuevos están entrando a la política a tratar de cambiar las cosas desde adentro pero que no llevan presidente, osea, no son Piñera o Guillier. ¿Como seduce Guillier?, les dice somos parecidos, como seduce Piñera negociemos o acordemos. ¿Cual es el riesgo?, que este importante grupo de ciudadanos se convierta en esa élite en la primera jugada y el país pierda la posibilidad de hacer mejor política hacia las personas. Es conocido que Warnken es "asesor" del FA, interpreto que este articulo se refiere a eso. Pero los chilenos, como toda la especie humana del mundo, estamos en la Posición actual, de mas poder y menos sentido, pero que todos los chilenos, en la actualidad, queremos agregar mas sentido a ese hipotético poder.
ResponderEliminarEste poder lo entrega lo técnico y la ciencia y el sentido, las experiencias. Queremos mejores experiencias. Si este importante grupo de ciudadanos cede a estas "seducciones", hasta ahí no mas llego la promesa de mejores experiencias.
Sr. Mansilla, desde que tengo uso de razón he escuchado frases parecidas a la suya "que un grupo importante de ciudadanos completamente nuevos están entrando a la política a tratar de cambiar las cosas". La historia nos demuestra que una vez que estos noveles políticos están adentro a muchos de ellos se les olvidan los ideales, ceden a las tentaciones del poder y caen en las redes de la maquinaria.
ResponderEliminarEl poder político no está en lo técnico sino en los pactos, enjuagues, tejemanejes componendas y otros arreglos de igual laya (Piñeras & Celedones)
El problema con la realidad es que no tiene remedio.
A esta raza le faltan muchas décadas para alcanzar un cambio de consciencia lo suficientemente profundo que nos permita dar un salto de calidad hasta -finalmente- transformarnos en ciudadanos.
Sr. Carraz, lo que se quiere decir es que el único y verdadero cambio en la política estará dado en la forma y el fondo de los acuerdos y considerar que la minoría, en cualquier caso sera una gran manoría. Si las decisiones siguen tomándose en base al desprecio de los otros seguiríamos por un pésimo camino. De esto se trata este articulo, en el mundo actual las decisiones son datos serios y acciones serias respecto del bienestar de las personas y no del bienestar de las personas que gobiernan. Entre otras.
EliminarCuando alguien (una persona o una empresa) vende un producto, lo hace para, supuestamente, suplir una necesidad. Y lo hace después de haber hecho un acabado estudio de mercado, para poder conocer exactamente cual es la necesidad de ese público (el mercado), a fin de entregar el producto adecuado, que cumpla con todas las expectativas para suplir esa necesidad.
ResponderEliminarEn política, pareciera que es igual.
Salen los candidatos en campaña, acompañados de hordas de "encuestadores / consultores" que van averiguando, inquiriendo con el público (mercado electoral), cuáles son aquellas necesidades que quieren y, sobre todo, necesitan satisfacer. (Necesidades que han sido fabricadas por el propio mercado).
Y ahí está el público, ansioso de dar a conocer sus necesidades, que en nuestro país son innumerables. Y los vendedores (candidatos) se hacen el pino con esa base de datos, (que es la misma para todos los vendedores porque todos preguntan lo mismo y a las mismas personas), y empiezan a preparar los ofertones, porque las necesidades son prácticamente las mismas para todos los chilenos (clientes).
"Compreme (vote por) a mí, yo le doy esto más esto y esto otro!!!"
"No, cómpreme a mí, porque yo le doy esto más esto y más de lo otro"
Y así, suma y sigue.
Warnken es, aparte de ser indudablemente un poeta, un soñador empedernido.
Se ubica en la realidad de lo no existente, para ofrecer otro producto de venta, pero totalmente utópico.
Estimo que las utopías ya no pueden ser parte del acontecer político del país. Ya pasó el tiempo de las quimeras y grandes sueños con los que, en épocas muy pasadas, los candidatos trataban de ilusionar a los votantes, a fin de lograr su apoyo.
Y esto, es porque estamos tremendamente divididos como sociedad; porque ya no existe el respeto por nada ni por nadie.
Hoy, solo impera el eslogan del "si puedo, te cago", a todo nivel.
Para lograr tener una política que realmente satisfaga las necesidades de los "consumidores" (votantes), hay que partir por tener un buen producto que ofrecer, y con proveedores confiables. Creíbles.
Debe ser un producto que deje contentos a todos por igual, y que equilibre la balanza de las necesidades.
Ya la política de "centro centro" (como decía Fra-Fra Errázuriz) no existe, y por Dios que se echa de menos.
O somos de aquí, o somos allá.
Pero, será eso tan cierto?
Tiendo a creer que existe una gran masa de compradores (votantes) que sí son de centro y, lamentablemente, en este momento no hay ningún vendedor que ofrezca el producto que quieren comprar.
Como consecuencia, están comprando el producto más parecido a lo que ellos quieren. Ya sea a Piñera o a Guillier.
Pero lo peor, es que la masa crítica de compradores (votantes) está bajando a pasos agigantados, y si eso sigue así, los vendedores se van a quedar sin compradores, y el mercado (país) se nos va a las pailas.
Ahí se nos acaba la democracia.
Con Piñera o con Guillier vamos seguramente camino a que salga al camino para las próxima elecciones un caudillo con la bandera del nacionalismo y el populismo. Difícil situación y con un país en que más de la mitad de su población no vota y le da lo mismo quien gobierne.
EliminarNo puedo sino agradecer a este gran diario de Algarrobo. Todos los días nos sorprende con noticias y artículos sean reportajes o columnistas que aportan diferentes puntos de vistas. Para es un lujo y máxime con la posibilidad de poder opinar. Poco a poco nos hemos ido habituando a la lectura diaria. Comprendo que detrás de ello hay un gran trabajo, lo cual debemos agradecer. En cuanto al articulo de Warnken es posible disentir en algunas cosas, pero que quedo con lo principal: que ambos candidatos marcan la declinación d los grandes líderes. Uno es un muy buen mercantilista y el otro un buen hombre y profesional de las comunicaciones en el lugar equivocado. No votaré y si lo hago será en blanco. Un país necesita líderes, estadistas, con carácter y empatía para motivar. Piñera tiene un discurso que ya cansó y Guillier parece un periodista de opinión, no lo imagino como presidente de Chile. Como dice el señor Carraz nos falta mucho para ser un pueblo con cultura, educación y consciencia ciudadana.
ResponderEliminarNo hay que ir muy lejos, basta con observar a nuestras propias autoridades comunales de los últimos 25 años
ResponderEliminarEl Sr. Quiroz ha hecho una reseña perfecta del mercantilismo político al que estamos sometidos. La fórmula de los ingenieros comerciales al servicio del mercado y las grandes empresas del retail (y que incluyen la letra chica) es la que hoy se aplica en todos los ámbitos de las ventas masivas, ya sea de productos, servicios o candidatos.
ResponderEliminarLamento Sr. Peralta que usted vote en blanco. Si me permite entrometerme en su decisión, lo impulsaría a votar por Piñera. En una sociedad donde la mayoría de la gente está presa de créditos vía plástico, corremos el riesgo que la inexperiencia política y económica de Guillier a cargo de la administración de este país nos lleve a una constricción económica de pronóstico reservado.