Artículo de
Opinión
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Diario)
Ernesto Ortiz Ananías
Vecino de Algarrobo
Observatorio Ambiental Algarrobino
En nuestra penúltima publicación
les presentamos el estado de la Comuna desde una perspectiva agrícola, donde
pudimos apreciar que el 58% de los suelos de la Comuna no pueden ser utilizados
para actividades agrícolas, el 31,6% necesita una buena dosis de tecnología
para poder utilizarlas y sólo un 2.1% está en condiciones de ser utilizada sin
mayores problemas. También se relacionó esto con la aparición y mantención de
la bonificación del 75% otorgada por los gobiernos de turno a partir de octubre
de 1974 para plantar pinos y eucaliptus, lo que se ha traducido en muchos casos
en la quema y tala del bosque nativo y en la conversión de tierras agrícolas
para actividades forestales.
Luego mostramos el estado de
los acuíferos que traen el agua a la Comuna, dando a conocer que todos se
encuentran con restricciones para la obtención de derechos de aprovechamiento
debido a que los volúmenes sustentables han sido sobrepasados con creces por
los derechos definitivos comprometidos a mayo del 2010.
¿Cuáles pueden ser las consecuencias de estas acciones para la Comuna?
Bueno, aparentemente las principales
consecuencias tienen que ver, por un lado, con los niveles de erosión que
presentan los terrenos comunales y por otro, con el grado de desertificación en
que se encuentra la Comuna.
La primera Figura (A, más abajo) nos
muestra la Clasificación de los Niveles de Riesgo de Erosión Potencial de los
suelos de la Comuna realizada por el Centro de Recursos Naturales (CIREN) del
Ministerio de Agricultura. Este es un instrumento de gestión utilizado para
establecer Planes de Manejo en Zonas afectas al DL701 (Decreto Ley que bonifica
la plantación de pinos y eucaliptus), para postular al subsidio de suelos
degradados y para preparar los Planes de Manejo de los territorios a incluir en
el SNASPE. Refleja la Tasa de Perdida de Suelo bajo las condiciones actuales de
suelo, topografía, clima y uso de suelo. Un 12,5% del territorio comunal
presenta un riesgo de erosión potencial moderada, un 71,2% presenta un riesgo
de erosión potencial severa y un 8,7 un riesgo de erosión potencial muy severa.
En otras palabras, la Tasa de Perdida de Suelo bajo las condiciones actuales es
alta. Esto nos muestra que, de seguir los actuales usos de suelo,
específicamente el uso forestal, dentro de poco tiempo la perdida de los suelos
agrícolas podría ser total.
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| A: Niveles de Riesgo de Erosión Potencial |
Por su parte, la segunda
Figura (B, más abajo) muestra el grado de
desertificación de la Comuna de acuerdo con la clasificación del territorio
realizada por el Sistema Nacional de Información Territorial (SNIT) del
Ministerio de Medio Ambiente. En ella podemos observar que el 98,9% de los
terrenos comunales presentan una desertificación grave y un 1.1% una
desertificación moderada.
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| B: grado de desertificación de la Comuna |
¿Como podrían autorizarse nuevos proyectos inmobiliarios si
prácticamente toda la Comuna presenta una desertificación severa?
Claramente, la poca agua que
queda debe ser utilizada para potenciar el turismo rural y las actividades
relacionadas con la producción local de agricultura y productos procesados que
puedan abastecer a la Comuna de productos rurales Gourmet.
A la vista de los antecedentes
presentados podríamos decir que 44 años de plantaciones forestales y el
sobreconsumo de agua producto de las actividades forestales y del incremento
poblacional, han dejado a la Comuna con una severa erosión de sus terrenos y un
estado de desertificación grave, que no admite ni las plantaciones forestales
ni la autorización de nuevos proyectos inmobiliarios que dependan de aguas
subterráneas para su funcionamiento.
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Sorprende que ante categóricos antecedentes no se vea una acción del Municipio por contrarestar esta situación y veamos como los proyectos inmobiliarios, de alto costo UF 5.500, invaden la comuna marginando sus utilidades y dejando posteriormente el problema el que deberá ser resuelto con platas del Gobierno Regional, es decir con la plata de todos damos solución al problema que genera un privado.
ResponderEliminarEstimado Alejandro, el problema mayor es que hay consecuencias que ni el Gobierno Central puede solucionar. Si las napas freáticas, que son las despensas de agua que tenemos se agotan, la única solución es que vuelvan a llenarse con aportes de agua proveniente de lluvias y deshielos. Desgraciadamente, y ya lo hemos estado viendo por varios años, los modelos de predicción de cambio climático indican que la Zona Central del país tendrá menos precipitaciones y nevadas, por lo que la probabilidad de que las napas vuelvan a llenarse es baja. Si a esto agregamos que los acuíferos que traen el agua a Algarrobo abarcan también parte de la Comuna de Casablanca, el volumen de consumo de agua va a ser cada vez mayor producto de la instalación de viñas en esa Comuna.
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