"Hago un llamado a las autoridades para que se pongan las pilas. El daño ambiental es inmenso, y no parecen comprenderlo. Es lamentable."
Fuente: Algarrobo al Día
Una actividad que durante años se había mantenido fuera de la primera línea de las denuncias medioambientales, el año pasado alcanzó una fuerte, casi inesperada y muy saludable resonancia: la extracción ilegal de áridos. Los casos se multiplican a lo largo de nuestro litoral; sin embargo, por su envergadura y relevancia, dos han concentrado gran parte de la atención de los medios y de la ciudadanía: el del Fundo Santa Margarita de Las Cruces, y el de la playa de Tunquén. Pese a que en ambos ya se han emprendido acciones legales, las faenas ilícitas hasta la fecha se mantienen, con menor o mayor regularidad, activas.
Respecto a Tunquén, el abogado Christian Lucero, en representación de la ONG Tunquén Sustentable, presentó un requerimiento ante la Municipalidad de Algarrobo, el cual obtuvo respuesta en mayo de 2018. En esta, se corrobora que la actividad extractiva, que se desarrolla en un sector cercano al Humedal -desde 2014 Santuario de la Naturaleza-, se realiza sin permisos ni autorización territorial.
Conversamos con Lucero para compartir con los lectores de AAD información actualizada respecto a este grave caso.
-La extracción ilegal de áridos en la playa de Tunquén se desarrolla hace ya varios años, pero dada la lejanía y relativo aislamiento del sector recién en estos últimos meses se dio a conocer más masivamente, generando natural alarma e indignación. ¿Qué acciones concretas se han llevado a cabo desde entonces para detener este ilícito?
Se realizó una denuncia al Dpto de Medio Ambiente de la municipalidad de Algarrobo. En virtud de ello, se constató que la actividad de extracción de áridos se realizaba en una zona de interés silvoagropecuario, no contando, por tanto, con patente municipal.
En vista que no se han cursado multas (no cuentan con permisos sectoriales ni de la autoridad medioambiental), se presentó una denuncia a la Superintendencia de Medio Ambiente. Desde esta, se ordenó realizar un informe técnico, realizado a través del Dpto de Medio Ambiente, que arrojó que existen dos pozos lastreros en playa grande de Tunquén: el del sector norte lleva extraídos 155.000 metros cúbicos de áridos, el más al sur 99.917 metros cúbicos de áridos (esto al 5 de julio de 2018). Lamentablemente, el proceso es lento en la Superintendencia y la crisis en Quintero Puchuncaví ha jugado en contra a la hora de fiscalizar en otras comunas. De ahí la importancia que el municipio hiciera su parte, pero lamentablemente no la ha hecho.
Por esta razón, en septiembre del año pasado interpusimos además un recurso de protección, sumando el apoyo de vecinos de todo Algarrobo, El Yeco y Mirasol, para salvaguardar el patrimonio natural y el derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación.
-Tras ese oficio donde se reconoce que la actividad se realiza en forma clandestina, ¿cuál ha sido la respuesta del municipio ante esta grave situación? ¿Se ha emitido un decreto de clausura, por ejemplo, como correspondería hacerse?
La ley ambiental señala que la extracción industrial de áridos es una actividad susceptible de afectar el medio ambiente por lo que debe ingresar a un Estudio de Impacto Ambiental . En la práctica implica someter el proyecto al SEIA, que es el instrumento que predice y previene los riesgos y daños al medio ambiente. Acá no se ha sometido el proyecto al Sistema y está fuera de norma. No cuenta con una resolución de calificación ambiental (RCA). Simplemente no pueden estar funcionando. La normativa señala que aquellos proyectos que durante su vida útil removerán una cantidad igual o superior a las 100.000 metros cúbicos deben someterse, si o sí, previamente a un Estudio de Impacto Ambiental. La situación en Tunquén es muy particular, las autoridades señalan que es muy lejos para ir a fiscalizar. Es algo insólito que no ocurre en otras comunas. Sin patente, sin permisos sectoriales, en zona prohibida por el plan regulador y sin estudio de impacto ambiental no pueden seguir funcionando.
Hago un llamado a las autoridades para que se pongan las pilas. El daño ambiental es inmenso, y no parecen comprenderlo. Es lamentable.
ALGARROBO sufre del síndrome del OMBLIGO DILATADO
ResponderEliminarSus actividades, controles y gestión, NO sale de
Las Cadenas, el Consistorial y la Caleta San Pedro.
Demasiados funcionarios de zapatos lustrosos y taco
alto para las damas. Hartos O km estacionados a la
vuelta de la casa rosada pero allí terminan los
amores por la Comuna. Como si fuera de otros.