IDENTIFICAN LOS LUGARES DE LA PROVINCIA Y EN ALGARROBO QUE SE VERÁN MÁS AFECTADOS POR EL CAMBIO CLIMÁTICO

Los humedales, la infraestructura en el borde marino y lugares habitados como San Sebastián son los más expuestos, según estudio. "Hay efectos en la disminución de las playas. Eso podría tener consecuencias en el Humedal de Cartagena, en el de Tunquén, en Algarrobo, y El Yali de Santo Domingo"

Por Jesús Farías Silva

Manuel Contreras, Investigador de la UPLA

Una investigación conjunta de cuatro universidades chilenas reveló que 100 comunas y cerca de 400 caletas de pescadores del país podrían verse afectadas por el cambio climático. Este último concepto, muchas veces refutado hace un par de décadas, llegó para quedarse. Su consecuencias, tristemente, también. 

Dentro de los territorios más expuestos están las seis comunas de la provincia de San Antonio, según el estudio que, a diferencia de análisis previos, entregó lugares específicos bajo amenaza. La laguna El Yali, en Santo Domingo, y la laguna de Cartagena son dos espacios naturales que podrían verse afectados. A estos se suma la Playa Grande de Cartagena, que se ha visto disminuida durante los últimos meses. 

Pero eso no es todo. Sectores poblacionales como San Sebastián también se verían impactados. El puerto de San Antonio y las caletas de pescadores igualmente tendrán que comenzar a ver sus consecuencias. Lo mismo pasaría en Tunquén y en la desembocadura del Maipo. País A nivel país, Valparaíso y Viña del Mar, luego de Concepción y Talcahuano, conforman los lugares con más exposición al cambio climático en la zona costera. 

Sus causas apuntan directamente al aumento del nivel medio del mar, pero por sobre todo al incremento en los últimos años de las marejadas en frecuencia e intensidad. Así lo indican los resultados preliminares del proyecto que, desde octubre pasado, ejecutan de manera conjunta especialistas de las universidades de Playa Ancha (Upla), Valparaíso, Pontificia Universidad de Católica de Valparaíso y Universidad Católica del Maule, el cual es liderado por el Centro de Cambio Global de la UC. La iniciativa, financiada por el Ministerio del Medio Ambiente, busca determinar el riesgo de los impactos del cambio climático en las costas de Chile, con lo cual aportará información inédita sobre el tema, así como un registro detallado de los lugares en peligro de inundación. Con ello podrán incidir en las políticas públicas de planificación de dichas zonas del país, de acuerdo a la Upla. "Generamos un catastro de exposición. Hicimos un recorrido exhaustivo desde Arica hasta el canal de Chacao, identificando todos los elementos que están en la costa, desde humedales, playas, dunas, infraestructura, los puertos, caleta de pescadores, y esa información estará disponible al servicio de cualquier persona en el portal del Ministerio de Medio Ambiente", precisó el académico de Ingeniería Oceánica de la Universidad de Valparaíso y jefe del proyecto, Patricio Winckler. 

En los próximos meses se publicará una segunda parte del estudio con información más detallada de la amenaza. Provincia El investigador del Centro de Estudios Avanzados de la Universidad de Playa Ancha (Upla) y líder del Equipo Amenazas de la iniciativa, Manuel Contreras, explicó que en la provincia de San Antonio el primer impactado será el puerto. "El cambio de la dirección y aumento de la frecuencia de las marejadas pueden tener un impacto en las operaciones marítimas", pronosticó. Los santuarios de la naturaleza más próximos al océano igualmente corren peligro. "Hay efectos en la disminución de las playas. Eso podría tener consecuencias en el Humedal de Cartagena, en el de Tunquén, en Algarrobo, y El Yali de Santo Domingo", detalló. La amenaza no es quedar hundidos bajo el mar, sino que ser embestidos una y otra vez por marejadas y vientos más fuertes y frecuentes. Lo mismo se repite para toda la costa. "En Chile el nivel del mar no es significativo. Son mucho más importantes los movimientos asociados al ciclo sísmico, por los desplazamientos y hundimientos que ocurren con los terremotos. En 2010, por ejemplo, Talcahuano se elevó dos metros, lo que significó un retroceso de 1.300 años en el avance del nivel del mar. Donde está El Yali, en Santo Domingo, hubo un retroceso (hundimiento) de 5 centímetros, lo que significó un avance equivalente a 300 años de aumento del nivel del mar. 

Lo que es significativo es el oleaje", expresó. -¿Entonces, fenómenos como la disminución de las playas y marejadas, definitivamente se quedarán en el tiempo? -Hay efectos de variabilidad climática, en los últimos años tuvimos el fenómeno del niño costero, como se denomina (calentamiento del nivel del mar) que no son permanentes. Sin embargo, cuando se ven los cambios con el tiempo se nota que hace 50 años, a mediados del siglo 20, se contabilizaban cinco efectos extremos de marejadas por año. En la región, hoy en algunas comunas contamos más de 20. En el caso del aumento de las marejadas, "por ser un fenómeno asociado al cambio climático, es permanente". -¿Qué se puede hacer? -El cambio climático es global. Lo que podemos hacer es mitigarlo y adaptarnos a ello. Desde la Upla agregan que si las planificaciones territoriales no consideran esta información, seguirán en primera línea para sufrir por las marejadas los servicios de salud, bomberos, establecimientos de educación municipal, técnica y superior, así como infraestructura industrial, portuaria y red vial. En igual situación se encuentran el patrimonio cultural (monumentos, sitios de interés turístico) y el patrimonio natural (áreas protegidas, sitios de interés para la conservación de la biodiversidad, humedales, playas y dunas). Las universidades ejecutoras del proyecto convocaron a un taller para levantar información de exposición de sistemas naturales y humanos de zonas costeras. Allí, especialistas de diversas instituciones de la región de Valparaíso contribuyeron a identificar nuevos lugares e instituciones que se verán afectados por el cambio del nivel del mar y las marejadas. 

Los investigadores afirmaron que en Chile hay 100 comunas costeras que son habitadas por menos del 5% de la población del país, pero hay muchas actividades de economía local que en ellas se desarrollan. Cerca de 400 caletas de pescadores artesanales se verán perjudicadas por el fenómeno del cambio climático, al igual que las playas de interés turístico y humedales, entre otros sistemas. "El aumento de la dirección y frecuencia de las marejadas puede tener un impacto en las operaciones marítimas", Manuel Contreras,, investigador de la Upla." "Hay efectos en la disminución de las playas. Eso podría tener consecuencias en el Humedal de Cartagena, en el de Tunquén, en Algarrobo, y El Yali de Santo Domingo", Manuel Contreras,, investigador de la Upla., Manuel Contreras,, investigador de la Upla."