Las opiniones vertidas en esta sección son de exclusiva responsabilidad de quien las emite.
Señor Director:
Saludando a su medio por el gran aporte que realizan a la comunidad algarrobina y del Litoral Central. A través de vuestro medio, quisiera alertar sobre el hecho de que el colapso de nuestro balneario en época estival se haya normalizado y, por ende, no se vislumbren espacios de discusión ni de construcción de soluciones.
El eslógan de “Capital Náutica” de Chile queda fuera de foco ya que el aumento en tres o hasta cuatro veces la población de Algarrobo hace que sea una ciudad -por decirlo menos - poco grata para habitarla tanto para los algarrobinos como para los turistas. Muy lejos queda la idea de disfrutar el mar, las playas y la naturaleza que en vacaciones nos regalan lugares para el descanso.
Una propuesta debiera hacer confluir conceptos de turismo sustentable, rescate patrimonial y natural y, sobre todo, ecológica, y que se aleje del marco neoliberal parco y sin colores en que los distintos balnearios del país tienen para ofrecer: seguridad ciudadana, playas abarrotadas, generación de basura, estacionamientos privatizados, tacos, ruidos molestos en las noches, entre otras situaciones que extienden lo que ocurre en la capital durante el año.
Si es posible la imaginación que se abre frente al bello mar y los santuarios de la naturaleza que Algarrobo y el Litoral Central tienen para compartir es posible que podamos crear un sistema de transporte público, atractivo para el turismo y accesible económicamente que conecte las playas de Algarrobo con las poblaciones y los diferentes sectores habitados. Esto evitaría a los vehículos particulares que inundan la “Capital Náutica”. Así podría ver correr un hermoso “tren turístico” que conectase las playas de Algarrobo con El Litre, Ciudad Azul, Canelo, Peñablanca, y los condominios como Acapulco que están en la carretera. Incluso, podría conectar con Mirasol, Tunquén, El Yeco y hasta Quintay, incluso con las comunas vecinas como El Quisco, Isla Negra y El Tabo y otras más allá. El paisaje permite un paseo turístico en que se enseñe la flora y fauna y se eduque en su fomento y cuidado. No es posible que en un trayecto de cinco minutos, en enero y febrero sobrepase la media hora en auto. El gasto de energía es tan abrumadora como la contaminación que se genera.
Es indispensable trabajar intensamente en la reducción de la basura domiciliaria ya que, además de ser muy fácil su disminución, se debe considerar el alarmante aumento de población flotante en verano y la inexistencia de un vertedero en la Provincia. Sí, toda la basura que se genera, termina en Valparaíso. Desde Algarrobo se podría reducir hasta en un 50 ó 60% si se reciclara, compostara y se enseñara a reutilizar los desechos.
Algarrobo puede ser más que una costa llena de automóviles que pagan por estacionarse, que hacen asados y botan basura. Nuestro distingo está en la riqueza natural, cultural y patrimonial, pero sobre todo, en la voluntad política que ello requiere.
Javier Karmy Bolton
Periodista
**** ****
Las cartas enviadas deben ser breves y dirigidas a la casilla algarrobodigital@gmail.com No exceder de un máximo de 1.000 palabras y consignar la individualización del remitente, incluyendo número telefónico. El editor no puede verificar la identidad del autor y por ello, solo reproducirá lo indicada por el remitente. En caso de que, por los efectos adversos que puedan tener lo informado, a petición del lector, omitiremos su identificación pública. El editor se reserva el derecho de publicar, extractar, resumir, titular y ajustar el texto sin consultan ni dar explicaciones. Los documentos y/o imágenes deben ser enviados en formato JPEG
* * * *
Invitamos a nuestros lectores a participar con sus opiniones escribiendo en el espacio habilitado de “Comentarios” de más abajo. También pueden hacerlo a nuestra casilla algarrobodigital@gmail.com Debe hacerse en forma respetuosa. Toda opinión que contenga insultos, injurias y/o calumnias será excluida. Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de quienes que los emiten, no reflejando la opinión del diario.
Agradezco esta publicación como lector de este medio. La agradezco porque plantea una propuesta de valor para Algarrobo. En ese animo y solo en ese animo, propuesta de valor, entrego mi opinión respecto de esto, creo, para contribuir:
ResponderEliminarCuando se expresa lo siguiente: "Una propuesta debiera hacer confluir conceptos de turismo sustentable, rescate patrimonial y natural y, sobre todo, ecológica, y que se aleje del marco neoliberal parco y sin colores", interpreto que cuando se dice marco "neoliberal" implica solo negocios y punto, eso no es verdad.Desde lo "neoliberal" nace un concepto que se denomina "Ciudad Humanista" y este concepto justamente aborda todos los puntos que para esta propuesta son relevantes. Lo que sucede con Algarrobo hoy es que la están derivando hacia un perpetuo balneario y eso no tiene nada de "neoliberal", tiene que ver con capitalismo anticuado y absurdo en estos tiempos para el desarrollo de las personas y las comunidades.Y desde el punto de vista del Turismo, este concepto de balneario no es sustentable porque el valor de un departamento o propiedad en muy poco tiempo mas no tendrá nada que ver con las prestaciones del "balneario", ni siquiera por el clima. Es mas, la mayoría de inversiones que se están haciendo corresponde al concepto de "Cerdo Capitalista"(Solo importa el dinero y la transacción), desde ya existen muchas familias "nacidas y criadas"muy favorecidas en su tiempo de esto,que se están descapitalizando, dejando una urbanización desnaturalizada y como eso es así, para ellos no tiene ninguna relevancia el medio ambiente o la confección de la ciudad del futuro. Esto como desarrollo estuvo bien, pero ya no es sostenible.Esta ocurriendo algo mas grave aun, se esta formando una periferia, con o sin intención, y eso ya es patético. Lo único que queda hacer es que este balneario se vuelva ciudad lo mas pronto posible y humanista, ojala. Ahora, volverla socialista o de otro color, no tiene sentido, porque eso seria solo funcional y esta demostrado que una ciudad solo funcional no da bienestar y felicidad a las personas.( Estas visiones que parecen política, no lo son, se trata de ver como vivir como ser humano)(Esto es solo una opinión)
Los actos de magia aplican en los escenarios donde el prestidigitador hace un ademán y ¡zás! aparece una paloma voladora o desaparece un edificio completo, como lo hace el gran ilusionista David Copperfield. Pero, para la vida real, para conseguir "crear un sistema de transporte público, atractivo para el turismo y accesible económicamente que conecte las playas de Algarrobo con las poblaciones y los diferentes sectores habitados" se necesita un acto, no de magia, sino de requete ingeniería vial, una gesta de la inventiva de alguna arquitectura urbana en referencia a convergencias, flujos, vías, avenidas y caminos, más un largo etcétera de otras consideraciones técnicas que, obviamente, ya no están al alcance de la realidad porque los elegidos por voto ¿popular?, aquellos asalariados y encargados de estos menesteres, no tienen ni la más p idea de cómo se hace, y sus ansiosos y atribulados cerebros están apenas conectados con otras cuestiones ínfimas que tienen que ver con sacarle el jugo al momento, conseguir todas las ganancias posibles vía influencias y conectes, apitutamientos a gran escala, aparecer en la fotos, soltarse con frases para el bronce y especializarse en el corte de cintas para inaugurar monumentos al palo o paraderos de buses que, al igual que el Transantiago, no tienen espacio para el bus...(¡já!)
ResponderEliminarRespecto de la otra ilusión, de aquella que tiene que ver con pedirle al chancho que no coma el afrecho que se le pone en el comedero (que es igual a pedirle a los residentes, "turistas" y locales que reduzcan la basura que producen) habría que decir que los basureros municipales son de un porte que no guarda relación alguna con la cantidad de porquerías que la gente deposita, tira y arroja sobre ellos, al lado de ellos, detrás de ellos o a donde caiga el paquete, la bolsa, el saco o a granel, de lo que sea, incluidos desperdicios de la construcción, pasto, ramas, colchones, refrigeradores, cocinas, muebles y una lista enorme de otras cosas que la gente ni se inmuta en considerar basura apta para el basurero común.
La nula vocación ciudadana que nos circunda desde la autoridad, lo público y lo privado, no da para ilusionarse con un Algarrobo de película, ni mucho menos para torcer el destino de una ciudad que ya se enfrascó en lo caótico y populista como el camino a $eguir. La plata manda y los pataleos de los ecologistas y amantes de lo sustentable apenas dan para detener algunas pocas mugres nuevas que asoman desde la vorágine comercialistoide que lo asola todo.
Por ahora, y ya que la magia no alcanza para reconstruir la historia, la otra ilusión es que aparezca el Santo y se haga el Milagro antes que llegue la roca que viene viajando desde el Cosmos indómito y que amenaza con darnos el guatacazo en el 2022
lo de valorar el patrimonio bien aunque ya se ga repetido hasta el cansancio pero los sucesivos gobiernos comunales fachos y populistas no lo han permitido. lo de reducir los residuos por favor muy atrasada esta muni ni siquiera tiene basureros. lo del tren no . basta de intervenciones antropicas agarre la bicicleta construya buen diseño de transito y punto. alcaldes regulen protejan controlen.
ResponderEliminarJosé, lo de "gobiernos comunales fachos" te deja en la puerta del horno donde se cuece el resentimiento. De todo lo demás que has dicho: ¡amén!
EliminarDa risa la palabra fachos cuando lo dice la izquierda Hitler era de izquierda y lo unico que lo hizo distinto es acabar con los comunistas. Eso fue una guerra de izquierda, tan parecidos son que Stalin hizo lo mismo con cerca de 5.000.000 de personas. Por otro lado, como si el patrimonio no lo cuidara la derecha o no le interesa el arte o las tradiciones, eso es mentira, lo que no hace la derecha con esto es que se convierta en amuleto o fetiche o dios.
ResponderEliminar