escritor & articulista
Para los más despistados, el 31 de Febrero se acerca a pasos agigantados. En sus mentes perturbadas por el caos y los tacos se agitan neuronas que parecen vislumbrar un futuro prometedor de Marzo en adelante, con las playas vacías sólo para ellos.
La perspectiva de ir de Mirasol al centro en menos de 5 minutos (en vez de 30) es el recordatorio de que la vida es buena, que el amor existe, que el paraíso está aquí y que todo fue una maldita pesadilla que sólo se repite unas cuantas veces en el año...como los pagos de la patente, el permiso de circulación, las contribuciones y otras de las tantas obligaciones que trae consigo la chilenidad por el sólo hecho de tener derecho a respirar y pasearte (obligatoriamente) cargando el rut.
En esta época del año, locales y residentes asumimos que cualquier idiota que se estaciona en doble fila o que nos bloquea la salida del estacionamiento en nuestra casa, ES y/o DEBE SER...un ¡¡&%$?¿@ santiaguino!!
La señora gorda y muy rubia, igual a la chica preciosa de la foto que aparece en el anvase de Koleston de Vella n°9 (pero en modelo ancho y antiguo) le toca la bocina de su monster car al señor de las bermudas multicolores (que debe medir 1 metro 90 y pesar unos 120 kilos) porque el muy energúmeno tuvo la osadía de pararse frente a su bestia motorizada por más de ¡5 segundos y no circular!...¡Habráse visto!
El energúmeno, giró su cabeza (montada en un cuello del grosor de un neumático de tractor) y le clavó la mirada a la doña como quien arroja un puñal con la punta llena de un veneno de esos que matan al primer contacto.
La gorda, ni se inmutó. Le devolvió la mirada con otro veneno de igual laya
El neanderthal playero meneó la cabeza, optó por retirarse y simplemente cruzó la calle con la intención de atravezar la rotonda de Mirasol
La doña, después de escupir unas imprecaciones no aptas para lectores menores de 6 años, se metió en la calle para rodear la rotonda y Oh My God! se topó nuevamente con el Hulk de las bermudas que justamente cruzaba del otro lado de la rotonda...
El error catastrófico de la rubia platinada vía Koleston, fue tocarle nuevamente la bocina...
La Bestia, giró sobre sí misma, se acercó al coche y tras darle un manotazo al capó se paró junto frente a la ventana de la blonde...
¡Vuélvete pa'Santiago vieja weona! ¡Ya se acabaron la vacaciones! ¡Agarra la 68 y llegái primero que nadie!
La Koleston, con el vidrio de su ventana convenientemente bien cerrado, gritaba su repertorio sin que nadie pudiera oir verdaderamente cuáles eran los impropios y poco sutiles recados para la buena madre del gigantón...
Finalmente, la rubia decidió que era hora de arrancar. Pero, claro, escapar sin disfrutar de las mieles de la venganza es una huida sin gracia, un escape indigno de quien tiene la sangre caliente y la mierda hirviendo...
Cuando se dio cuenta que Hulk ya no podría alcanzarla, bajó la ventana, giró el cuello y asomó la cabeza de rubia cabellera lo justo para gritar
¡Roto de porquería! ¡Mastodonte de feria! ... ¡¡Hijo de puta!!
Inmediatamente declarado el estado de guerra, la gordis aceleró su monster hasta perderse en la distancia.
El sucedáneo de Goliat la vio partir como quien observa (tras darle a la palanca del wc) cómo casi todo lo incluido en la cuenta del restaurante (caro y malo) da un par de vueltas antes de desaparecer para siempre. En su mirada había desencanto y frustración.
Su dedo del medio levantado fue lo último que la doña bien alimentada alcanzó a ver en el retrovisor.
¿Será que la felicidad está por llegar justo cuando el calorcito del sol está por partir? ¿Es el santiaguinismo la causa de muchas de nuestras enfermedades, empezando por aquellas que nos vuelven ansiosos, rabiosos y vociferantes?
Aquel letrero meme en un restaurant que reza "Si es santiaguino haga el favor de disimularlo" ya tiene imitadores en otros lugares de Chile donde la masa "capitalinista" llega en tropel, aporta las lucas y luego se marcha dejando a sus espaldas una nube de polvo, odios paridos y también $entida$ no$talgia$. Es que mientras unos se forran con la invasión, hay otros que se joden la vida con ella y luego, cuando regresa la calma, aún les toma unos cuantos días recuperar la compostura, deshacerse de los pensamientos oscuros y ansiosos, del manejo nervioso, del síndrome del estacionamiento y los tacos o de esa retorcida imaginación que les hacía pasar rabias anticipadas con la idea de salir cada mañana para ir al trabajo o luego tener que ir al supermercado...
Lo que sí parece claro es que la gran metrópolis caótica y desbordada no mejora a la gente. Por más mecanismos, modernismos, por muy Sanhattan que se crean, por mucho mall, mucho tag, mucho Metro y otros engranajes progresistas, el despelote manda y la gente se pone fiera, dura, aguda y filosa para sostener la estirpe en una selva de leones hambrientos (de corbata), hienas encubiertas (siempre listas para dar el tarascazo o el portonazo) y otros vivarachos de la fauna de concreto que saben sacarle jugo a los insaciables anhelos de la gente por hacerse de cosas y soltar el tarjetazo.
La ley es perfumarse antes de poner un pie en la calle, caminar muy rápido y transformarse en bestia apenas se haya instalado detrás del volante.
En Santiago, los perros, se manejan como ejecutivos en la Alameda; cruzan con luz verde, se mueven entre los transeúntes como si fueran uno más, consiguen comida sin desparramar los basureros (porque saben que habría problemas si así hacen) y ya tienen suficiente astucia y sapiencia como para derretir el calloso corazón de sus "clientes" que les tiran su mendrugo.
¿Cuánto duraría un perro algarrobino en la metrópolis antes de pasar mejor vida apachurrado por un auto o una bicicleta o un monstruo del Transantiago? ¡Nada...minutos!
¿Y qué pasaría si me traigo un perro de la Alameda y lo suelto a la entrada del Lider a las 2 de la tarde en Mayo?
Lo primero, quedaría absolutamente desorientado. Creería que es domingo. Posiblemente, se preguntaría: ¿Qué diablos pasa...por qué estos tipos caminan tan despacio? ¡Qué raro, no veo a niun'won urgido! ¿Habrá restricción de todos los números al mismo tiempo? ¿Será una epidemia zombie o el Calentamiento Global?
La alegría que ya viene es un panorama en el que la calma y los espacios abiertos se toman el ambiente de las calles, de las playas, de los estacionamientos, del tránsito que se mueve como si el destino final del viaje no tuviera mucha importancia...no hay urgencias ni tampoco está esa larga, interminable y cargante serpiente de fierros que nos atrapa cada verano.
31 de febrero!
ResponderEliminarEl editor parece que es Jose Feliciano ajhsjahjsa
La pura verdad!!! Por eso amo Algarrobo de Marzo a Diciembre.
ResponderEliminarBuena historia y bien contada. Solo un alcance, no es que las personas que vienen de Santiago sean "idiotas", no, se vuelven idiotas en Algarrobo. ¿Porque?no cumple sus expectativas,todo es lento, trabado y caro. De hecho cuando ven un gesto de amabilidad, creen que se están riendo de ellos. Los Santiaguinos son mal recibidos por el error de venir a veranear a Algarrobo, la gente los ve como plaga necesaria.Y esto muestra una "incultura" increíble. Mucha gente en pocos metros cuadrados, no es que de verdad haya mucha gente, si no que el espacio es muy chico. ( Una opinión)
ResponderEliminarAsí es, profesor Carraz. Lentamente, se cumple, una vez mas, el término del espererado ciclo de la invasión "afuerina", y retomamos el período del andar cancino, la conversa en la esquina y del trámite lento, sin que nadie nos eche la choreada ni el garabato hiriente.
ResponderEliminarEs que el santiaguino está mal. Muy mal.
Como que no son capaces de re-conectarse con la naturaleza (esa que extraviaron entre tanto edificio, paradas de semáforo y buses atestados), y se mueven, como zombi desnutridos y hambrientos, con caras de reflujo de cebolla en escabeche y ojos desorbitados.
Me dan pena. Pero demosles la oportunidad. A ver si ahora, que están reconstruyendo el famoso "camino del medio", veamos caras más amables, partiendo por los locales, pobres mortales usuarios del día a día de esta calamidad.
Estimado, no creo que todo sea culpa del Santiaguino, o afuerino, si te fijas bien la comuna no está preparada para el boom de turistas que nos visitan en el verano.
EliminarHay demasiadas falencias que persisten año tras año y que no se ve en el corto plazo que se puedan solucionar.
No es posible tener una sola avenida para llegar al mismo Mirasol, lo mismo para El Quisco, nos cortan esas dos calles y nos separan del litoral, así de mal conectados estamos. Y esto provoca tacos, malos ratos, peleas, estres, etc, etc...
Algarrobo debiese tener claro que es una comuna de veraneo y prepararse para aguantar tal contingente de afuerinos, si al final el turismo aporta gran parte de las lucas que entran al comercio, gastronomía y hoteleria que existe acá.
No hay que ver al turista como enemigo, sino que simplemente preparar a Algarrobo para que sea un lugar ameno durante todo el año, y no solo de marzo a diciembre.
Por eso encuentro que es una estupidez por parte de la administración comunal gastar los pocos recursos existentes en plazas y más plazas que nadie visita, nadie toma en cuenta, y que solo sirven para adornar unos cuantos metros cuadrados de tierra.
Es cierto lo que tu dices. Algarrobo no está, en absoluto, preparado para recibir a tanta gente. A duras penas puede atender, medianamente bien, a nosotros, los residentes vitalicios.
EliminarPero los veraneantes, vengan de donde venga, tampoco ayudan a hacer la cosa más agradable. Es que les cuesta mucho sacarse el traje del estrés!! Por eso, hay que vivir aquí, tranquilito y caminar pasito a pasito.
Si, pero todo Chile no puede venir a vivir a Algarrobo, hay que ser un poco empatico y pensar que los turistas vienen a disfrutar (o tratar) de la comuna durante un lapso muy corto de tiempo.
EliminarYo también andaría neurótico si vengo por dos semanas solamente durante el año, y en esas dos semanas me atienden mal, me cobran hasta por respirar, gasto gran parte del tiempo en tacos, etc, etc...
Ellos tratan de disfrutar en algo, pero nosotros tampoco se la hacemos tan fácil.
Vivimos acá, es cierto, y por el sentido de pertenencia, queremos a nuestra comuna, pero irremediablemente todos los veranos seguirán llegando turistas, entonces hay que exigir a las autoridades que se pongan las pilas y hagan de Algarrobo un lugar disfrutable para todos durante todo el año.
Ahí está la madre del cordero. La elección de autoridades que logren avances y levanten y mejoren Algarrobo, tanto para residentes como para visitantes.
EliminarSe acercan las elecciones municipales, así que veamos cual es el programa de desarrollo que presentará (supuestamente), cada candidato. Y a votar por el mejor, no por el menos malo. En conciencia, no por el partido.
Me cagué de la risa!! Maestro!!! excelente perorata, lo único que no sabía es que febrero tiene 31 días jajajaj
ResponderEliminarEs que Allien siempre ha tenido una visión más amplia, de mayor alcance... Jajajajaja
EliminarExcelente columna ¡¡¡¡ jajajaj
ResponderEliminarMuy buen análisis, los turistas son los que permiten el enorme desarrollo de nuestro querido Algarrobo, el "cliente" siempre tiene la razón, se debe tener cultura para atenderlos bien, y creo que no cuesta gran cosa mejorar los caminos de acceso a los diferentes lugares cercanos, una sola "gran avenida" no es inteligente, el camino costero que une Mirasol con Algarrobo, debería ser un paseo para automovilistas, ciclistas, peatones y otros, no para comunicarse con la carretera y otros lugares cercanos o ir al comercio, para ello tiene que existir una vía de servicio.
ResponderEliminar¿Y la gorda qué?
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