Una vecina de Tunquén ha visto en varias ocasiones una máquina que se acerca al cauce del Estero de Casablanca, de donde extrae áridos. Esta situación se da tras la orden de la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) que ordenó paralizar las faenas de extracción de áridos de las dunas de Tunquén. En este caso, el estero es de propiedad fiscal por lo que está está protegido por la ley y su modificación incurre en una actividad ilegal.
Las consecuencias medioambientales son grandes ya que el cauce del agua cambia, se estanca, lo que no permite que fluya hacia el Santuario de la Naturaleza Humedal Tunquén. Además el cambio en los flujos de agua deterioran el oxígeno existente para los peces, destruyendo así su hábitat.
Revisa el siguiente video captado por una vecina del sector:
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