EN ALGARROBO TIENEN LA FÓRMULA PARA SANAR MENTE Y CUERPO A TRAVÉS DE LA SONOTERAPIA

Amalia Mella se instaló en Algarrobo y espera abrir muy pronto su propio centro para entregar las bondades de esta milenaria técnica.

Nicole Guzmán

Líder San Antonio

Las terapias alternativas generan cada vez más adeptos, sobre todo porque son complementarias a tratamientos médicos que pueden causar dolor, o para el estrés y la depresión que agobian más a las personas debido al agitado estilo de vida que llevan.

Amalia Mella ofrece una pausa para la contemplación y la introspección con su "Sonoterapia", técnica que consiste en recostarse en el suelo, mientras ella va pasando de pies a cabeza con el relajante sonido de sus cuencos tibetanos y el gong.

Rapa nui

Por esas cosas de la vida, Amalia se fue a vivir a isla Rapa Nui, donde comenzaría su camino por las terapias alternativas.

Allá conoció a Samai, una mujer que trabajaba con círculos de mujeres. Ella le enseñó algunas de las técnicas que ahora ofrece a sus pacientes, otras las fue aprendiendo con cursos y diplomados.

Hace muy poco tiempo Amalia Mella se radicó en Algarrobo, donde está a punto de abrir las puertas del recinto Amisol, un centro que se dedicará por completo a este tipo de terapias.

-¿Hace cuánto que te dedicas a la sonoterapia?

-Hace cinco años, me he ido perfeccionando, realizando diplomados y cursos. Uno estudia la terapia de sonidos, yo soy una terapeuta en cuencos tibetanos.

-¿Por qué se usan los cuencos tibetanos?

-Porque ahí uno va trabajando con las dolencias dependiendo de nuestros puntos energéticos, mejor conocidos como chakras y que muchas veces están muy bloqueados.

Sonoterapia

La sonoterapia es una técnica traída desde Oriente. Amalia la complementa con el quiromasaje para que también sea una terapia a nivel muscular y emocional.

"Muchas veces nos podemos relajar a nivel muscular, pero tenemos una ´yaya´, alguien que nos da vuelta en la parte emocional", cuenta la terapeuta.

La base de la sonoterapia descansa sobre el principio de la resonancia. "El objeto vibrante, en este caso el cuenco, provoca vibraciones en nuestro ser, en nuestro cuerpo físico y en otro lado espiritual", cuenta Amalia.

Hay dos modalidades de la terapia. Una es junto a cada luna llena, en una ceremonia con más personas, todas recostadas en el suelo. Ahí, Amalia pasa con su cuenco tibetano haciendo este melodioso sonido que cura el alma y el cuerpo.

"Yo no hago meditación guiada. La idea es que cada persona pueda conectar con su dolencia que quiere sanar para llevar la vibración a esa parte del cuerpo o a esa dolencia de la emoción", explica.

La terapeuta cuenta algunos detalles de cómo sería participar en una de estas ceremonias. "Luego de esa pequeña introducción en la ceremonia de la luna, les digo que conecten con lo que deseamos sanar o con lo que deseamos trabajar. Por eso no es como el yoga u otra terapia con meditación guiada durante cada sesión, porque cada uno está sintiendo diferente y sanando una parte distinta".

Esa terapia, al que se puede ir en grupo, tiene un valor de cinco mil pesos por persona y se realiza idealmente acostado pero también va a depender de la dolencia que tenga cada persona.

"Muchas veces los dolores físicos son en lugares específicos, como en la parte lumbar por ejemplo. Ahí se sugiere que el paciente se ponga en forma fetal. Idealmente es acostado, porque así la persona se puede llegar a relajar y podemos trabajar mucho mejor", sugiere la terapeuta.

Resultados

Es extraño explicar cómo funcionan las terapias alternativas, debido a que el paciente debe tener una completa disposición para que estas operen, cualquiera sea. Sobre todo terapias como esta, que ofrecen apoyar o reparar alguna dolencia incluso emocional.

La profesional comenta que siempre tiene una variación dependiendo de la persona, pero que aún así se logran buenos resultados con esta terapia.

"Sirve mucho para conectar con uno mismo cuando se está perdido y no sabes qué hacer, o tienes unas de esas depresiones que te atrapan. Lo que hace la sonoterapia es conectarte contigo mismo, y tú te escuchas. Como estamos inmersos en este sistema tan acelerado, lo que hace esto es bajar la velocidad en la que estamos diariamente y escucharte, y ver la vida que no es tan complicada y tan grave como siempre la vamos viendo", explica.

Los principales resultados que ha tenido cuando las personas están con un nivel de ansiedad o o mucho estrés es que pueden "bajar todas esas dolencias y estabilizan los otros temas". También, como complementario al tratamiento de la fibromialgia, hace que disminuyan los dolores.

Niños

Amalia recomienda mucho esta terapia cuando los niños son hiperactivos o distraídos. "Es impresionante ver cómo los pequeños bajan las 'revoluciones', como yo les digo. La hiperactividad y el desorden que tienen se pueden mejorar si los ayudamos a ordenarse y ser más consciente de ellos mismos".

En bebés se toman algunas consideraciones como hacerlo desde una distancia más grande que para los demás. "A ellos les gusta mucho, se ríen todo el rato", comenta la terapeuta. Las embarazadas también pueden acceder a esta terapia.

Amalia Mella comenta que la mayor parte de sus pacientes son personas que proviene de fuera de la provincia de San Antonio, que vienen los fines de semana largos y aprovechan de hacerse una terapia o derechamente vienen a eso.