Por Pablo Salinas
El viernes voy a visitar a su casa a María Isabel Baeza. Para los que no lo sepan, María Isabel, Maisa, es una de las vecinas más destacadas de nuestra comuna. Se mantiene hasta octubre, me cuenta, como presidenta de la Junta de Vecinos de Algarrobo Norte, cargo en el que durante al menos los últimos cinco, seis años ha desarrollado una labor ejemplar. Con un tesón a toda prueba, ha logrado mantener a raya la arremetida de poderosos intereses. Emblemática fue su gestión contra la instalación del mega-proyecto inmobiliario Arenamaris. Su oposición, sólida, decidida, la hizo pagar un precio alto. Se negó a que un área verde terminara engullida por el gigante de cemento que el empresario Emil Sosman levantó en el sector norte de la playa. Tuvo que enfrentarse no solo a los abogados de la inmobiliaria, sino también a la hostilidad de las autoridades locales. No conformes con que el caso del área verde se extendiera en tribunales, cuatro concejales de nuestra comuna la demandaron por instalar letreros que le advertían a los vecinos sobre el grave peligro que significaba que todo el sector contara con solo una vía de evacuación en caso de tsunami.
Si hoy me dice que ya está cansada, que en octubre tras las elecciones dejará su cargo a alguien nuevo con cierto alivio, la entiendo perfectamente. Finalmente, Maisa ganó, la Corte Suprema le dio la razón a los vecinos, le torció la mano a la inmobiliaria y al municipio y el perímetro del área verde obliga a desviar unos metros el acceso al condominio Arenamaris. El juez de Algarrobo, por su parte, tras varias idas y vueltas, le ordenó a modificar levemente el texto de los letreros y cerró el caso. De los concejales de esa acusación vergonzosa, dos quedaron en el olvido; por desgracia, otros dos aún se mantienen calentando asientos en el salón municipal.
Pero Maisa, luchadora, me muestra algo antes de irme: en un plano que despliega sobre la mesita de centro del living, me señala que una franja de metros de Arenamaris traspasa la línea de playa, ocupando un bien nacional de uso público. ¿Será tarea de quien la suceda en el cargo profundizar en las indagaciones e iniciar las acciones pertinentes?
Me despido. Quiero tomarle una foto junto a la emblemática área verde, pero me dice que prefiere que no. Que no quiere más problemas.
Resulta no solo absurdo, sino francamente estúpido constatar que a pocos metros de la playa un letrero nos avise con grandes letras sobre la vía de evacuación en caso de tsunami. Es plena zona de inundación en caso de maremoto, zona en rojo en los mapas de la Onemi, donde la ola en esta tierra de permanente choque de placas tectónicas puede avanzar cientos de metros de manera franca, sin ningún tipo de contención posible. Casi frente al letrero, la torre de 14 pisos de Arenamaris, y el proyecto contempla la construcción de al menos otras 3 torres similares... Quiénes planificaron territorialmente esta comuna merecen una querella colectiva; los que pretendan no modificar y corregir la situación actual, también.
Inmensa la labor de Maria Isabel Baeza, felicitaciones por el reportaje, es importante que se destaquen estos vecinos y su valentía.
ResponderEliminarLa esperanza que las cosas cambien sin embargo son pocas: dos de los cuatro concejales corruptos que demandaron a Maria Isabel apoyados por el abogado del inmobiliario inexplicablemente fueron reelectos, una de las primeras obras publicas del nuevo alcalde fue pavimentar el acceso a Arenamaris...
Solo queda decir GRACIAS MARIA ISABEL POR TU TRABAJO !!!
¿ Esto es participacion ciudadana? No, pero de debio haber sido. Una ciudad como Algarrobo es la suma de sus partes, pero es mas que eso. Esta integracion o mirar la ciudad integralmente es absolutamente importante para el desarrollo. Si la Sra.Maisa hubiera perdido habria perdido Algarrobo eso hay que entenderlo y los ciudadanos. Entonces, esto debio ser una causa ciudadana. Esos 4 concejales atacandola por los letreros, ¿ hay que darce cuenta de lo que significa eso?, Claro que si,ellos no querian que esto se convirtiera en una causa ciudadana. El poder atropellador de normas y reglamentos apoyados por alguna autoridad incompetente y parece que algo mas. Hay que entender que el territorio de la ciudad no puede ser mal tratado tampoco las normas y reglamentos y cada vez que esto ocurra, no importa la embergadura, debe convertirse en causa ciudadana y defenderla como causa ciudadana. Ya no se puede decir o hacer que no importa, porque la codicia, la corrupcion, la vivaraches sistemica termina afectando a los ciudadanos de manera implacable y perversa. Eso hay que entenderlo. La causa ciudadana y las elecciones son las expresiones de las personas y debe usarse correctamente. Esos 4 concejales, que muy bien no fueron publicados sus nombres, es obligacion personal saber quienes son, es una obligacion personal y no colectiva saber quienes son. ¿ Porque saber esto? Porque se requieren las causas ciudadanas como expresion de las personas para tener una ciudad con desarrollo sostenible y equilibrado. Y concretar en acciones que es la votacion para elegir autoridades comperentes, realmente competente para la ciudad y los ciudadanos.
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