Por Ernesto Ortiz
Aparte del vertimiento continuo de aguas servidas a la Zona Costera de Algarrobo, producto del emisario submarino de ESVAL que aquí opera, también hay vertimientos esporádicos.
Quienes son los responsables de estos vertimientos? No lo sabemos, pero a quienes sean, queremos decirles que ahora los estamos observando prácticamente en tiempo real.
Aquí les dejamos dos ejemplos de vertimientos de líquidos cargados de nutrientes a la zona costera de Algarrobo. A que corresponden exactamente, no sabemos, pero hay una probabilidad razonable de que también correspondan a aguas servidas.
El primer vertimiento se puede observar el 16 de enero de 2021. La imagen a la izquierda muestra el punto de origen del vertimiento, que en este caso corresponde a la playa de Tunquén. La imagen a la derecha, muestra la extensión espacial cubierta por el vertimiento. Probablemente el punto de origen está en la parte sur de la playa de Tunquén.
El segundo vertimiento se puede observar el 28 de enero de 2021. La imagen a la izquierda muestra el punto de origen del vertimiento, que en este caso corresponde al sector comprendido entre el desarrollo inmobiliario Arena Maris y Bahía de Rosas. La imagen a la derecha muestra la extensión espacial cubierta por el vertimiento.
Aunque el vertimiento de Tunquén fue de mayor magnitud que el de Mirasol, ninguno de ellos es despreciable desde la perspectiva de la contaminación de la Zona Costera de Algarrobo.
Aquí hay personas que saben de esto, y se les solicita su cooperación para que esto no siga ocurriendo. Sólo si la comunidad ayuda a vigilar esto se puede parar, caso contrario, aunque sea en forma esporádica, se va a continuar contaminando aun más, la ya contaminada Zona Costera de nuestra comuna.
Si partimos por el principio, uno se pregunta ¿cómo es posible que lleguen aguas servidas al mar desde (aparentemente) un megaproyecto que a su vez tuvo que hacer un súper proyecto sanitario que debió ser aprobado por Higiene Ambiental y revisado in situ por la Dirección de Obras del Municipio y que ¡obviamente! no puede arrojar ni una gota de nada a ningún mar de ninguna parte? ¿Sabe alguien cuál es el principal eslabón que se rompe en la cadena? ¿Quién es el que no cumple con su parte no fiscaliza y de paso recibe las jugosas recompensas por el delito de propiciar el deterioro y el envenenamiento del bien común y del patrimonio ciudadano?
ResponderEliminarBien por nosotros, Sr. Ortiz, que esté usted batallando abnegadamente en las labores de proteger lo que nos pertenece a todos, aún por encima de la desmoralizadora realidad de que las autoridades encargadas de velar por tales bienes no cumplen con su trabajo y mucho menos con sus deberes y responsabilidades. Muchas gracias