LA POLÉMICA PLANTA DE HORMIGÓN QUE OPERA EN ALGARROBO

Por Pablo Salinas

La polémica se instaló hace ya largos meses, cerca de diez, cuando una planta productora de hormigón comenzó a operar en el sector de El Bochinche de Algarrobo. Se trata de un sector históricamente ligado a lo rural, con parcelas y de baja urbanización, por lo que la puesta en marcha de una planta de estas características generó natural desconcierto entre los vecinos. 

En diciembre pasado, el municipio entregó mediante ordinario n°1132 antecedentes del caso a la concejala Marcela Mansilla. Estos señalan que, tras inspecciones en terreno, se había comprobado que la planta entró en operaciones sin los permisos municipales correspondientes y que el caso se había derivado a la Dirección de Obras Municipales, a fin lograr su regularización.

Respecto a la normativa territorial, la planta se ubica fuera de la zona urbana de la comuna, quedando, por tanto, sujeta al plan regulador intercomunal, instrumento que define el sector como ZEDU, es decir, Zona Excluida al Desarrollo Urbano, la que permite algunas actividades productivas, siempre ligadas a lo agrícola: agropecuarias, ganaderas o forestales, quedando fuera las ligadas al ámbito de la construcción.

Tan llamativo como lo anterior, es lo que se refiere a la normativa ambiental: el "informe técnico de fiscalización ambiental", emitido por la DIMAO municipal señala que la actividad de la planta no figuraría en el listado de actividades que están sujetas a evaluación de impacto ambiental que establece la ley 19300. en circunstancias que ésta, en su Artículo 10, literal k), es clara en señalar como actividad susceptible de generar daño ambiental las "productoras de materiales de construcción".