¿ES NUESTRO PAÍS, UN PAÍS CORRUPTO?. Carta al director

Estoy triste, soy abogada y junto a muchos otros colegas nos sentimos vulnerables, el caso Luis Hermosilla, "Un Colega", nos ha dejado a todos quienes ejercemos esta hermosa profesión, en la más absoluta desconfianza en un Poder del Estado, como lo es el Poder Judicial.

¿Cuantos de nosotros hoy podríamos pensar que hemos sido víctimas de tráfico de influencia? lo que obviamente, afecta el ejercicio de nuestra profesión, pero más grave aún, afecta la confianza que ustedes depositan en nosotros.

Confío, más bien tengo esperanza, que la Corte Suprema cumplirá con el Mandato Constitucional de sancionar a todos los involucrados y propondrá todos los procedimientos y medidas necesarias para evitar el colapso de nuestra institucionalidad.

Lo que está ocurriendo a nuestro país, no lo vimos venir, nosotros como ciudadanos responsables debemos ser observantes de las conductas de quienes están en cargos públicos, de quienes ejercen el poder político, legislativo y judicial.

¿Es nuestro país, un país corrupto?

No lo sé, pero estamos a tiempo de de hacer las correcciones necesarias. Hoy las ideologías no son el problema, el problema radica en la corrupción, el narcotráfico y el crimen organizado, ahí es donde debemos poner nuestras energías y clavar la mirada.

Marcela Mansilla Potocnjak

Abogada